Habían pasado ya 10
años desde la batalla para proteger el Reino Sadida. Los jóvenes aventureros ya
tenían más de 20 años, y ya no se habían podido volver a reunir, Amalia ya era
la reina del Reino Sadida, y no tenía casi tiempo libre para sus amigos. Yugo
se hizo un panadero que trabajaba en el Reino Sadida, Amalia ponía excusas sólo
para ir a hablar con él. Evangelyne se había casado con Ser Tristepin, vivían
en una casa en el Reino Sadida, trabajaban como Centinelas, defendiendo el
Reino de ataques de criaturas del bosque o de Tymadores que van a saquear el
Reino. Ruel murió en una de sus aventuras. Cleophee lo sustituyó hasta acabar
todas sus aventuras, ahora sigue combatiendo y navegando con sus amigos por los
cuatro mares.
Un día Cleophee fue al Reino para felicitar a su hermana y a Tristepin por la boda. Amalia bajó a ver a Yugo.
-Hola Yugo.- Le dijo Amalia con una sonrisa.
-Hola Amalia, no tengo trabajo, ¿te gustaría ir al parque a pasear?-dijo correspondiendo su sonrisa.
-Vale.- Respondió Amalia.
Los dos se fueron al parque, allí se encontraron con Tristepin y Evangelyne.
-Hola Eva, hola Pin Pan.- Saludaron los dos a la vez.
-Hola Amalia, hola Yugo.- Saludó Tristepin.
Eva los miró con una sonrisa.
-¿Nos sentamos en alguna mesa todos juntos?- Propuso Evangelyne.
-Claro.- Respondió Amalia sonriendo.
Todos se fueron a buscar una mesa, y se sentaron en ella y empezaron a hablar sobre lo que hacen y recuerdan buenos momentos de los viejos tiempos. Cleophee los encontró allí charlando, se acercó a ellos para saludarles y felicitar a la recién pareja.
-Hola a todos.- Les saludó Cleophee con una sonrisa. -Hermana, enhorabuena, y a ti también Pin Pan por la boda.
-Gracias.- Respondieron los dos con una sonrisa.
-Siéntate con nosotros.- Dijo Yugo mirándola con una sonrisa.
Se sentó y continuaron hablando. Lobo los vio a todos ahí hablando y se acercó a hablar con ellos.
-Hey, hola a todos.- Les saludó sonriendo.
-Hola, Lobo.- Le saludaron todos con una amplia sonrisa.
Se sentó con ellos y continuaron hablando. Hasta que salió un tema.
-Hoy se han jubilado dos Centinelas, y si nos hacen una emboscada no podremos defendernos bien, Cleophee, ¿te gustaría ser una Centinelas del Reino Sadida?-
-Vale, me encantaría,
así estaría más cerca de mi hermana.- Respondió Cleophee con una sonrisa.
Y siguieron hablando hasta el anochecer, cuando anocheció se fueron cada uno a su casa, Amalia a su castillo, Yugo a una habitación que tenía en la panadería, Evangelyne y Tristepin a su casa y Lobo fue a enseñarle a Cleophee las cabañas de los Centinelas.
Un día Cleophee fue al Reino para felicitar a su hermana y a Tristepin por la boda. Amalia bajó a ver a Yugo.
-Hola Yugo.- Le dijo Amalia con una sonrisa.
-Hola Amalia, no tengo trabajo, ¿te gustaría ir al parque a pasear?-dijo correspondiendo su sonrisa.
-Vale.- Respondió Amalia.
Los dos se fueron al parque, allí se encontraron con Tristepin y Evangelyne.
-Hola Eva, hola Pin Pan.- Saludaron los dos a la vez.
-Hola Amalia, hola Yugo.- Saludó Tristepin.
Eva los miró con una sonrisa.
-¿Nos sentamos en alguna mesa todos juntos?- Propuso Evangelyne.
-Claro.- Respondió Amalia sonriendo.
Todos se fueron a buscar una mesa, y se sentaron en ella y empezaron a hablar sobre lo que hacen y recuerdan buenos momentos de los viejos tiempos. Cleophee los encontró allí charlando, se acercó a ellos para saludarles y felicitar a la recién pareja.
-Hola a todos.- Les saludó Cleophee con una sonrisa. -Hermana, enhorabuena, y a ti también Pin Pan por la boda.
-Gracias.- Respondieron los dos con una sonrisa.
-Siéntate con nosotros.- Dijo Yugo mirándola con una sonrisa.
Se sentó y continuaron hablando. Lobo los vio a todos ahí hablando y se acercó a hablar con ellos.
-Hey, hola a todos.- Les saludó sonriendo.
-Hola, Lobo.- Le saludaron todos con una amplia sonrisa.
Se sentó con ellos y continuaron hablando. Hasta que salió un tema.
-Hoy se han jubilado dos Centinelas, y si nos hacen una emboscada no podremos defendernos bien, Cleophee, ¿te gustaría ser una Centinelas del Reino Sadida?-
Y siguieron hablando hasta el anochecer, cuando anocheció se fueron cada uno a su casa, Amalia a su castillo, Yugo a una habitación que tenía en la panadería, Evangelyne y Tristepin a su casa y Lobo fue a enseñarle a Cleophee las cabañas de los Centinelas.
Comentarios
Publicar un comentario